miércoles, 21 de diciembre de 2011

Taller en la calle

Creíamos que con el torneo del Colegio San Ignacio nuestras actividades del año habían terminado, pero no fue así. Antes de guardar tableros, piezas y relojes hasta marzo, nuestro taller de ajedrez participó de la muestra del COGGZAI en la feria educativa organizada por la Corporación Municipal de Quilpué en la plaza Irarrázabal, el pasado jueves 15 de diciembre. En ella, cada establecimiento municipalizado de la comuna mostró lo más representativo de su quehacer académico anual. El objetivo: difundir en la comunidad las bondades de las escuelas públicas quilpueínas y contribuir de paso a mejorar las bajísimas matrículas del sistema. 
La muestra de nuestro colegio se estructuró en base a tres áreas. En la primera, bajo un toldo cuyo armado estuvo lleno de dificultades, exhibimos fotografías impresas de diversas actividades de  la escuela, al tiempo que en un televisor LCD mostraba un show de fotos que preparé a partir de la versión que hice para la feria del año pasado. En el segundo sector, cuatro muestras se sucedieron durante la mañana: el Proyecto de Integración Escolar, el taller de música, el taller de arte y el taller de repostería. Finalmente, frente a ellas, el siempre inquieto equipo de ajedrez instaló sus tableros y piezas, dispuestos a jugar durante toda la mañana, entre sí o contra cualquiera que deseara hacerlo.


La idea era mostrar nuestro trabajo habitual en el taller, así que organizamos un minitorneo suizo a cuatro rondas con los dieciséis jugadores con mejor asistencia tanto a los torneos como a nuestras sesiones de práctica de los martes y miércoles: Annabelle, Monse, Muriel, Camila, los dos Jorges, Francisco, Franco V., Lucas, Álvaro, Enrique, Bastián, Alejandro, Joaquín, Luchito y Brian. Todos ellos, más Franco Saravia, ausente en esta ocasión, y el retirado Jamil Constantino, fueron los responsables de los éxitos de este año. La exhibición ajedrecística de los niños concitó mucho interés, sobre todo de parte los alumnos de otras escuelas municipales presentes en la feria, quienes se sentaban constantemente a jugar con los nuestros. Particularmente llamaban su atención los trofeos y los relojes de juego. Además, tuve la sorpresiva alegría de ver a mis ex alumnas Abigaíl y Elizabeth Villagra, que jugaron en el equipo en 2009.


Todo resultó perfecto. Para nuestra estadística, el ganador del minitorneo fue Bastián. Por mi parte, pese a mi renuencia inicial a participar, debo reconocer que fue agradable sacar el taller a la calle. Como para hacerlo otra vez el próximo año.