Nuestra biblioteca CRA cuenta con tres computadores para uso de los niños durante los recreos, más uno destinado exclusivamente al trabajo administrativo. Naturalmente, los equipos tienen una alta demanda entre el alumnado, por lo que hemos debido organizar un sistema de turnos que permita que todos puedan tener acceso a ellos, ya sea para hacer sus tareas e investigaciones, o bien con fines meramente recreativos.
Con el paso del tiempo, se hizo evidente la necesidad de un software que permitiera supervisar y controlar las actividades de los PCs, además de cerrarlos remotamente al terminar el recreo para apurar el retorno a la sala de clases. Luego de probar con algunos softwares gratuitos destinados al control de cibercafés, y de haber descartado algunas alternativas pagadas, encontré una buena solución en el programa iTALC.
Orientado específicamente al trabajo de un profesor en un aula de informática, iTALC (Intelligent Teaching And Learning with Computers, enseñanza y aprendizaje inteligente con computadores) ofrece la posibilidad de controlar constantemente el trabajo de los alumnos en los equipos en los que esté instalado. Además, permite al docente realizar demostraciones exhibiendo su pantalla en las de los alumnos, enviar mensajes de texto a cada estación de trabajo, controlar remotamente un equipo, bloquear las terminales, abrir y cerrar sesiones, y encender y apagar los computadores. Es, además, totalmente gratuito y de código abierto.
Para utilizarlo, es necesario ir a la página del proyecto y descargar el paquete de instalación. Durante la instalación en cada PC, se debe especificar si se trata del computador maestro (profesor) o uno de los clientes (alumnos). Luego, para establecer la comunicación entre los equipos, hay que copiar una carpeta llamada "keys" desde el PC maestro hasta los clientes (reconozco que en este paso tuve algunas dificultades). Al encenderse los computadores, se debería ejecutar automáticamente un servicio propio (ica.exe) que es el que establece la comunicación entre los equipos; sin embargo, en ocasiones he debido iniciar manualmente el servicio (ejecutando services.msc , iTALC Client), cuando -por razones que desconozco- no se inicia solo al encender el computador. Finalmente, en la aplicación principal que se ejecuta en el equipo maestro, hay que crear una clase, en la que luego se registrará cada uno de los equipos clientes según sus nombres de red.
En resumen, a pesar de que el proceso de instalación fue un poco enredado, iTALC nos ha resultado de gran ayuda, tanto para controlar las actividades de los niños, como para asistirles cuando ellos se encuentran trabajando o investigando; y es una alternativa gratuita perfectamente válida frente a otros programas similares pagados. Más información, en la página del sofware iTALC (en inglés) o en la wiki del proyecto (en español).